Con la finalidad de contribuir a crear ambientes de respeto y armonía entre los universitarios, el Programa Institucional por la Equidad de Género, adscrito a la Vicerrectoría de la Unidad Regional Centro, implementa un plan de acción que permita prevenir y atender los casos de violencia de género que se presentaran en el contexto universitario.
En los últimos años, el Programa Institucional por la Equidad de Género ha realizado diversas actividades dirigidas a concientizar, sensibilizar y visibilizar la necesidad de crear condiciones equitativas para los géneros entre la comunidad universitaria.
Con este propósito se han impartido cursos, talleres y actividades de difusión, entre las que destacan el conocido Violentómetro y la realización de la marcha naranja en contra de violencia de género, entre otras.
Derivado de este esfuerzo, en el presente ciclo académico se creó el esquema de trabajo Por una Universidad libre de violencia de género, que tiene el propósito de sensibilizar y concientizar a la comunidad universitaria acerca de los temas de violencia de género, reveló la vicerrectora de la Unidad Regional Centro, María Rita Plancarte Martínez.
La violencia de género en cualquiera de sus representaciones impacta negativamente en el desarrollo personal de la víctima, pero además es una situación que refleja una preocupante problemática social, de la cual la Universidad de Sonora no ha quedado exenta, reconoció.
Entre las acciones que se implementan se encuentra la difusión de una serie de recomendaciones denominadas Buenas prácticas para la convivencia académica, que son nueve aspectos pensados para contar con espacios seguros y libres de violencia, y principalmente que la relación docente-estudiante se realice en un contexto de respeto mutuo.
Plancarte Martínez abundó que esta serie de sugerencias contempla el uso de plataformas institucionales para la comunicación docente-estudiante, entrega de calificaciones sólo en espacios académicos, en días hábiles y en horario laboral, y lo mismo deberá procurarse para el caso de las asesorías, tutorías y aplicación de exámenes, además de evitar comentarios y chistes sexistas o en doble sentido, sólo por citar algunos.
Otro aspecto importante, destacó, es reforzar la cultura de la denuncia por parte de la comunidad estudiantil ante cualquier acto de violencia, ya sea acoso, hostigamiento, de género o docente que comenta cualquier miembro de la comunidad universitaria que labore en la institución e, incluso, por parte de los mismos alumnos, subrayó.
Reconoció que se trata de uno de los temas de mayor preocupación de la comunidad estudiantil, por lo que hizo un llamado a denunciar ante la Comisión de Derechos Universitarios (CDU) cualquier caso de violencia, y será el Programa Institucional por la Equidad de Género la instancia que brinde seguimiento a las mismas, a fin de asegurar que los casos recibidos sean atendidos debidamente.
Es responsabilidad de todos los miembros de la comunidad universitaria promover relaciones de convivencia armoniosa basadas en el respeto, puntualizó.